Hace unas semanas me apunté a la beta del próximo windows 7. Hace un par de días lo instalé en mi macbook, al cual le tenía con bootcamp y tanto leopard como windows xp instalados, éste último mayormente para usar la grabadora de dvd y poder imprimir en un par de impresoras que tengo que no soportan OS X. El caso es que hace 3 días instalé el windows 7 sobre la anterior instalación de windows xp. No he trabajado mucho con él, realmente no he pasado de hacer unos cuantos tests e indagar un poco donde estaban las cosas, ya que desde windows xp no había instalado otra versión, ni los media center ni el vista, aunque ya tuve un par de encontronazos con éste último en otros equipos.
El caso es que la primera impresión ha sido bastante buena. El sistema se mueve ágilmente y aunque sigue dando el coñazo con algunas preguntas absurdas del tipo de “¿esta seguro de instalar esta aplicación?” después de haberlo descargado, grabado a dvd y ejecutado (hablo de los drivers del bootcamp), pero bueno, eso también lo hace Leopard. Lo que me ha sorprendido gratamente ha sido el internet explorer 8. ¡Hasta parece un navegador digno! Como desarrollador, después de tantos problemas con internet explorer y su poco respeto a los estándares de desarrollo web, ahora me encuentro que testeando algunas de mis páginas más conflictivas anteriormente con internet explorer –sobre todo con css y javascript–, ¡casi todas funcionan bien! No perfectas, pero al menos como lo suficientemente bien para no arruinar la experiencia del usuario y no tener que suponer grandes esfuerzos para los desarrolladores.
Ahora bien, será complicado migrar a toda esa gente que aún utiliza el internet explorer 6 a nuevas versiones de ése navegador, ya no veas a un navegador más decente.